El estudio encontró un vínculo entre los suplementos de ácido fólico y una reducción del 44 % en los intentos de suicidio y las autolesiones.
Un nuevo estudio de la Universidad de Chicago ha investigado la relación entre el tratamiento con ácido fólico y los intentos de suicidio durante dos años. Los investigadores encontraron que los pacientes con recetas de ácido fólico, también conocido como vitamina B9, experimentaron una reducción del 44 % en los eventos suicidas (intentos de suicidio y autolesiones intencionales).
El estudio utilizó datos de las reclamaciones de seguros de salud de 866.586 pacientes. Los investigadores se centraron en el ácido fólico y tuvieron en cuenta muchos posibles factores de confusión, como la edad, el sexo, los diagnósticos de salud mental, otros medicamentos para el sistema nervioso central, las afecciones que afectan el metabolismo del ácido fólico y más. Incluso después de ajustar todos estos factores, aquellos con una receta de ácido fólico todavía estaban asociados con un menor riesgo de intento de suicidio.
Los investigadores también encontraron que cuanto más tiempo tomaba una persona ácido fólico, menor tendía a ser su riesgo de intento de suicidio. Cada mes de prescripción de ácido fólico se asoció con una disminución adicional del 5 % en el riesgo de intentos de suicidio durante el período de seguimiento de 24 meses de su estudio.
Dado que la investigación en esta área es relativamente nueva, los investigadores aún no pueden decir si la relación entre el ácido fólico y los eventos suicidas es causal; por lo tanto, aún se desconoce si tomar ácido fólico reducirá directamente el riesgo de suicidio de una persona. Los investigadores están dando seguimiento a este estudio con un ensayo controlado aleatorio (ECA) a gran escala para evaluar si el ácido fólico reduce directamente el riesgo de eventos suicidas, incluida la ideación, los intentos y la finalización.
En respuesta a este artículo, el Dr. Joshua Roffman, director de la Iniciativa de desarrollo temprano del cerebro en Massachusetts General, dijo:
“Este es un estudio importante que vincula el uso de ácido fólico, una vitamina B, con un menor riesgo de intentos de suicidio en un grupo muy grande de pacientes en los EE. UU., utilizando bases de datos de seguros. El suicidio es un resultado devastador, y la posibilidad de que una intervención económica, segura y ampliamente disponible pueda prevenir algunos casos de suicidio podría tener un impacto sustancial en la salud pública. Esta posibilidad está respaldada por trabajos previos de nuestro laboratorio y otros que sugieren los efectos protectores de la exposición prenatal al ácido fólico en otros resultados de salud mental, como el autismo y la esquizofrenia, en personas jóvenes.
Dicho esto, estos nuevos resultados muestran asociación pero no causalidad, y se necesitarán estudios controlados aleatorios prospectivos que involucren a personas con riesgo de suicidio para proporcionar respuestas definitivas sobre si el ácido fólico puede proteger contra las autolesiones. Dada la naturaleza benigna de la intervención y la relativa escasez de intervenciones basadas en medicamentos que muestren evidencia para la prevención del suicidio, el imperativo de realizar estos ensayos es muy claro”.
MQ financió al Dr. Joshua Roffman y su equipo en la Universidad de Harvard para un estudio que exploró por primera vez si la exposición al ácido fólico en la primera oportunidad, cuando el bebé se está desarrollando en el útero, podría proteger al cerebro contra el desarrollo de síntomas psicóticos. Puedes leer más sobre este estudio aquí.
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