¿Cómo nos convertimos en seres conscientes? ¿Cuándo y dónde aparece nuestra conciencia? Estas eternas preguntas de filósofos y científicos han vuelto a salir a la luz a la luz de investigaciones recientes.
Un equipo de neurocientíficos y filósofos de Australia, Alemania, Estados Unidos e Irlanda realizó una revisión de la literatura que promueve nuestro pensamiento sobre la conciencia temprana en los recién nacidos. Los resultados de este estudio fueron publicados en Tendencias en Ciencias Cognitivas.
Durante mucho tiempo, filósofos y científicos se enfrentaron al problema de determinar el momento en que comenzó la conciencia. ¿Cuándo toma conciencia un bebé recién nacido del mundo que le rodea?
Algunos sugieren que esto sólo ocurre muchos meses después del nacimiento, mientras que otros argumentan que los primeros momentos de conciencia pueden ocurrir poco después del nacimiento.
Tim Bain, filósofo de la Universidad de Monash en Australia, dice: “Casi todos los que han tenido en brazos a un bebé recién nacido se han preguntado cómo es ser un bebé. Pero, por supuesto, no podemos recordar nuestra infancia, y los investigadores de la conciencia no están de acuerdo sobre si la conciencia surge “temprano” (al nacer o poco después) o “tarde” (alrededor del año de edad o incluso mucho más tarde).
Una revisión reciente de la literatura ha reforzado la idea de que la conciencia puede comenzar mucho antes de lo que pensábamos. Los autores del estudio presentan cuatro líneas de evidencia para respaldar que la conciencia emerge más cerca del momento del nacimiento.
Esta evidencia incluye conexiones cerebrales ampliadas, medidas de atención, estudios que integran información de múltiples sentidos y marcadores físicos asociados con la sorpresa y la redirección de la atención.
«Nuestros hallazgos sugieren que los recién nacidos pueden integrar el desarrollo de respuestas sensoriales y cognitivas en experiencias conscientes coherentes para comprender las acciones de los demás y planificar sus propias respuestas», dijo. dice Psicóloga del Trinity College de Londres, Lorina Naci.
Esto no significa necesariamente que la conciencia se active repentinamente al nacer, sino que podemos esperar un despertar gradual de la experiencia que se desarrolla a medida que las sinapsis se fusionan, los sentidos se mezclan y la cognición construye modelos que pueden cuestionarse a medida que surgen nuevos estímulos.
Las preguntas sobre si la conciencia está fragmentada o completa, si los fetos sueñan o incluso cómo podemos relacionarnos con la conciencia del recién nacido aún están lejos de tener respuesta.
A medida que mejoren las técnicas de escaneo cerebral y podamos mapear mejor el complejo entramado de redes neurológicas a medida que crecen, seremos capaces de entender la conciencia como un continuo.