El 1 de diciembre, la Tierra sentirá el primer golpe de un fuerte viento solar que ha estallado a partir de una grieta gigante en la atmósfera del Sol. La brecha se formó el día anterior, 28 de noviembre de 2022, y fue notada por el Observatorio de Dinámica Solar de la NASA.
Al mismo tiempo, comenzó el «borrador»: poderosas corrientes de partículas cargadas volaron hacia la Tierra a una velocidad de 2,5 millones de kilómetros por hora.
Cuando lleguen al planeta, provocarán un huracán geomagnético -no el más fuerte- de nivel G1, pero lo sentirán las personas dependientes del clima y los equipos que respondan a los cambios en el campo electromagnético.
Son posibles interrupciones en la comunicación, fallas en el funcionamiento de los sistemas de navegación. La aurora boreal parpadeará en las regiones del norte.
El huracán, provocado por “calado”, durará hasta el 2 de diciembre inclusive.
El viento solar es una corriente de partículas cargadas liberadas desde la atmósfera superior del Sol, llamada corona.
Estas partículas cargadas vuelan a través del sistema solar a velocidades que van desde aproximadamente 250 millas (400 kilómetros) por segundo hasta 500 millas (800 km) por segundo, en estado de plasma, según el Centro de Predicción Meteorológica de la Administración Nacional Oceánica y Espacial. en nueva pestaña) (SWPC).