Aumento de las temperaturas y Olas de calor son la última amenaza ppor salud. Una de las conclusiones más peligrosas es la correlación entre las altas temperaturas y el aumento de la incidencia de abortos espontáneos. La exposición prolongada al calor extremo parece afectar negativamente a las mujeres embarazadas, lo que genera preocupación sobre la salud materna en un mundo cada vez más afectado por el calentamiento global.
Además de los problemas de salud reproductiva, la relación entre las altas temperaturas y la violencia también han sido objeto de análisis. La historia científica ha mostrado un aumento en los niveles de agresión y violencia en las comunidades afectadas por olas de calor prolongadas. Esta tendencia alarmante sugiere que a finales de siglo enfrentaremos casos de violencia que se duplicarán exponencialmente en la actualidad.
Las temperaturas extremas también pueden empeorar condiciones médicas como enfermedades cardiacas y respiratoriasplanteando desafíos adicionales para los sistemas de salud en un contexto de cambio climático en constante evolución.
El riesgo de aborto espontáneo aumenta en un 44% debido al calor
hasta un 30% de los embarazos terminar en aborto espontáneo en las primeras 12 semanas de gestación. Lo cierto es que casi la mitad de los abortos son inexplicables y existen pocos factores de riesgo conocidos que justifiquen las pérdidas. Sin embargo, en 2022, investigadores de la Universidad de Boston descubrieron que el riesgo de aborto espontáneo podría aumentar en los meses de verano.
El estudio analizó las diferencias estacionales en el riesgo de aborto espontáneo y concluyó que las mujeres embarazadas (dentro de las primeras ocho semanas) estaban expuestas a un 44% peligro en los meses de veranoparticularmente a fines de agosto, en comparación con las que quedaron embarazadas en febrero.
Los resultados de la investigación, realizada en EE. UU., también revelaron que las mujeres que vivían en lugares donde los veranos son más calurosos (este y sur del país), era más probable que sufrieran esta pérdida a finales de agosto y principios de septiembre. Se basaron en la temperatura del aire medida por la estación meteorológica más cercana a los hogares de los participantes.
Las mujeres que viven en lugares donde los veranos son más calurosos tienen más probabilidades de tener abortos espontáneos a fines de agosto y principios de septiembre.
Ahora, otro estudio financiado por el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano de Boston cruzará datos de investigación de 2022 con muestras recolectadas por una serie de monitores personales usados por mujeres. También completarán un cuestionario donde responderán preguntas sobre la cantidad de espacios verdes en los barrios donde viven, cuánto tiempo pasan al aire libre y si tienen aire acondicionado. El objetivo es especificar la vínculo entre el calor y el aborto espontáneo y cuando el estrés por las altas temperaturas es más crítico para las futuras mamás.
A más temperatura, más violencia
Un grupo de investigadores sugiere que el aumento de la temperatura está relacionado con la aumento de algunos delitos violentoscomo homicidio intencional, agresión sexual o violencia interpersonal. Según un estudio publicado en la revista médica británica La lancetaLos delitos relacionados con la violencia mostraron una distribución estacional en la que la mayoría de ellos ocurrieron en verano o en temporadas más calurosas, a diferencia del invierno.
Por ejemplo, cada aumento de 5ºC en la temperatura media diaria entre 2007 y 2017 se asoció con una Aumento del 4,5% en delitos sexuales la semana siguiente en siete ciudades de EE.UU. Un análisis a nivel nacional en Japón entre 2012 y 2015 encontró que los transportes en ambulancia debido a agresiones aumentaron linealmente con el aumento de las temperaturas diarias.
Según el estudio, es probable que la violencia interpersonal en climas cálidos «continúe y aumente en el futuro con el aumento de las temperaturas debido al cambio climático». La investigación cuenta con el apoyo de un artículo de harvardlo que indica que podría haber 22.000 asesinatos adicional, 1,2 millones de ataques 2.3 millones de agresiones agravadas y simples debido al cambio climático en los EE. UU. para fines de este siglo en comparación con 2010.
Disparador de mortalidad
Según ISGlobal, el calor también es un detonante de mortalidad. En los días de altas temperaturas aumenta el número de muertes. Esto no se debe a las muertes por golpe de calorde los que hay muy pocos casos, sino porque el calor puede empeorar los síntomas y provocar episodios fatales en personas que padecen determinadas patologías.
Un estudio realizado en Españaquien analizó datos de 1990 a 2004, concluye que el aumento de la mortalidad durante los meses de verano es de 14,6%. Es decir, cuando la temperatura máxima aumenta 1ºC, la mortalidad aumenta un 3,3%.
El impacto del calor varía según el diferentes áreas geográficas. El estudio observa que las provincias del sur y oeste de España presentan un mayor riesgo de mortalidad asociada al calor (con porcentajes que oscilan entre el 19 y el 29%), mientras que las zonas de Mediterráneo la mortalidad en los días calurosos solo aumenta entre un 2 y un 9%. El único caso diferencial cerca de la costa mediterránea es el de la ciudad de Barcelona, donde la mortalidad se dispara un 27%.
Cuando la temperatura máxima aumenta 1ºC, la mortalidad aumenta un 3,3%
Las causas de mortalidad en periodos de ola de calor se deben principalmente a problemas mentales y del sistema nervioso, o eso se afirma una investigación realizada en Cataluña. Las personas afectadas son pacientes con problemas psiquiátricos y personas que toman medicamentos psicotrópicos (como los enfermos de Alzheimer o demencia), que provocan una reducción de la eficacia de los mecanismos termorreguladores que los hace más vulnerable a las altas temperaturas.
Otras enfermedades que se ven gravemente afectadas por las altas temperaturas son aquellas con afecciones cardiovasculares o respiratorias. Diabetes, enfermedades renales o del sistema urinario.
Más tiempo al aire libre y más lesiones
Otro factor agravante del calor para jóvenes y deportistas es el aumento de visitas a urgencias con lesiones de diversa índole. Estos se producen por el aumento de las prácticas deportivas y de ocio en verano, al haber más horas de luz, y que a su vez provocan fracturas en extremidades, esguinces articulares, traumatismos y dolores de columna.
En cuanto a las lesiones por zambullidas en piscinas, playas o ríos, van en aumento tanto los pequeños como los traumatismos leves, hasta las lesiones medulares con secuelas irreversibles. Crece también el peligro de insolaciones y quemaduras en la piel por la incidencia del sol.